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lunes, 1 de abril de 2013

Cedro de Atlas. Trabajo y Trasplante.

Reconozco que últimamente tengo el blog algo abandonado, porque la verdad es que las nuevas responsabilidades con la ACB y el resto de las adquiridas, no me dejan demasiado tiempo para escribir. No obstante, aprovechando estos días libres de vacaciones de Semana Santa, he decidido ponerme al día con las tareas.

Este mes era el momento de trabajar un árbol muy querido para mí. Necesitaba un trasplante con urgencia ya que sospechaba que podría estar dándome la lata el sustrato que tenía pues el verano pasado lo pasó mal e incluso me perdió una rama sin motivo aparente. Afortunadamente, una de las ramas que le sobraba, jeje...
Aquí una imagen del cedro desmelenao porque para que se recuperase, no lo había tocado desde el año pasado.

Esta es la imagen trasera, donde se puede observar esa rama muerta.


Y este el frente:


Primero definir ramas y valorar cuáles sobraban, porque está claro que había demasiadas, incluso había zonas en las que salían tres del mismo sitio. Colocar tensores, alambrar y en fin, esas cosas que ya sabéis y que me salto (hasta de fotografiar, jaja), ya lo veréis al final.

Me centro más en el trasplante  que tuvo su tarea. Al levantar el cepellón nos dimos cuenta de que realmente  no habría aguantado un año más en el sustrato que tenia, por lo tanto, fue una decisión correcta la de llevarlo a cabo.


Preparar maceta, alambres de sujeción, nuevo sustrato....
El sustrato utilizado ha sido akadama/pómice en proporción 2:1, para así garantizar el buen drenaje.


Costó sacarlo.



Manos a la obra, cortamos las raíces circulares de los bordes y a golpe de palillo, sacar la tierra anterior. Había restos de arena del anterior trasplante en la zona central, por lo que tuvimos que ser muy insistentes..



Todo el mundo colaboró porque realmente resultaba agotador, nos fuimos turnando, de otra forma, imposible....
Aprovecho para dar las gracias a todos mis compis por su ayuda y muy especialmente a mi amigo Nacho, que fue quien realmente lo ejecutó y supervisó.




Tras colocar correctamente en su maceta y rellenar con el nuevo sustrato, ahora a palillear toca, también tuve ayuda....

Se bajaron las ramas que tenía tan horizontales, lo cual no parecía propio de un cedro. Se diferenció primera rama, segunda, trasera y sucesivas, aligerando la masa verde. Se colocaron tensores y se pelaron y alambraron los jines nuevos, con el objeto de repasarlos más adelante.

El resultado aquí lo tenéis. Las fotos no son muy buenas, pero en cuanto deje de llover, haré más y mejores...


Ahora cuidados básicos de U.C.I. pos-trasplante: estimulantes de las raíces tipo, sombrita, revitalizantes foliares, en fin...lo esencial.Y a esperar que brote correctamente.....

Saludos.
Hasta la próxima entrega.

May Martínez





4 comentarios:

  1. Me gusta el resultado, despues de verlo tan desmelenado, el cambio es más que evidente. Seguro que se recupera rapidamente del transplante que por otra parte le hacia falta, ese cepellón lo estaba pidiendo a gritos.

    Un abrazo.

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    1. Esperemos, Loli.
      Sí, tenía claro que, o lo hacíamos, o el árbol no respondería bien en lo sucesivo.
      Gracias por tu comentario, un abrazo.

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  2. Así entre amigos es un gusto trabajar los árboles. El cedro se ve muy bonito. Con ese retoque en el modelado y el transplante que ya necesitaba seguro que va a responder con un magnífico crecimiento.
    Un saludo. César.

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  3. En el bonsai como en todo, es mejor disfrutar en compañía y se ve que todos estaban disfrutando como niños. Un árbol imponente al que el transplante le ha sentado muy bien. Seguro que irá como un tiro.
    un abrazo

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